FORMILIANO PUSO LA FIRMA

Este San Lorenzo que deja la piel, que transmite un fuerte sentido de pertenencia, ahora tiene otro futbolista que lo defienda. Se trata del uruguayo Fabricio Formiliano, un marcador central de vasta experiencia, con presencia y con poderoso juego aéreo.

 

El defensor de 1.85 de estatura arribó a Buenos Aires, se realizó la revisión médica y, pasado el mediodía del viernes, firmó su contrato como jugador de San Lorenzo, por 18 meses. Así se transforma en la cuarta incorporación para el plantel de Rubén Insua, agregándose a Carlos Auzqui, Federico Girotti y Gastón Ramírez.

 

Formiliano nació hace 30 años en Salto. Debutó con 18 años en la Primera División de Danubio. A partir de ahí, dibujó una carrera que incluyó un pasaje en el fútbol argentino (Newell’s, en 2016). También disfrutó una etapa más que positiva en uno de los gigantes uruguayos, en Peñarol. Su último club fue el Necaxa de México.

 

Formiliano es un zaguero diestro de 1,85 que debutó en Danubio en el año 2011. Ya sabe lo que es jugar en el fútbol argentino: lo hizo en Newell’s, en 2016. También pasó por Peñarol y por el Necaxa de México, donde jugó hasta mediados del mes pasado. Acumula en su carrera 313 partidos disputados, con 24 goles convertidos, un buen promedio tratándose de un defensor.

 

Fue campeón cuatro veces en su carrera. Un torneo uruguayo ganó con Danubio (2014). Con Peñarol conquistó otros dos (2017 y 2018) y además ganó una Supercopa Uruguaya (2018). Ahora buscará sumar otra estrella luciendo la camiseta más linda de todas.